La turmada es un plato típico de la cocina venezolana, que se consume en una ciudad de las montañas andinas del Estado Táchira, llamada la Grita. Se trata de un pastel de papa y otros ingredientes dispuestos en capas y horneado y gratinado al horno. Aquí te comparto una receta para preparar la turmada:

Ingredientes:

- 2 kg de papas grandes de tamaño estándar

- 1 gajo entero de cebolla junca (ciboulette o cebollín)

- 2 litros de agua para la cocción de las papas

- Mantequilla para engrasar el molde

- 100 grs de tocineta de cerdo o jamón , trozos de 2 cm

- Salsa de tomate

- 500 grs de queso blanco, rallado

- Salsa Bechamel

Preparación:

- Pelar y lavar las papas. Cortarlas en rodajas delgadas y cocinarlas en agua con sal hasta que estén blandas, pero no deshechas. Escurrir y reservar.

- Picar finamente la cebolla junca y mezclarla con el vinagre blanco, la salsa bbq y el cilantro picado. Reservar.

- Engrasar un molde refractario con mantequilla. Colocar una capa de papas, cubrir con la mezcla de cebolla, salsa y cilantro. Agregar trozos de tocineta y queso rallado. Repetir el proceso hasta terminar con los ingredientes, dejando una capa final de queso.

- Cubrir todo con salsa bechamel y llevar al horno precalentado a 180°C por unos 20 minutos o hasta que el queso se dore.

- Servir caliente o tibio, acompañado de ensalada verde o pan.

El maridaje de la turmada es una cuestión de gusto personal, pero se puede sugerir algunas opciones que pueden armonizar con este plato. La turmada es un guiso de patatas al horno con queso, salsa de tomate, panceta y otros ingredientes que le dan un sabor rico y contundente. Por lo tanto, se puede buscar una bebida que refresque el paladar y contraste con la grasa y el dulzor del plato.

Una opción es el vino tinto, que puede ser un merlot, un cabernet sauvignon o un malbec, que son vinos con cuerpo, taninos y acidez que pueden equilibrar el plato. Se recomienda servir el vino a una temperatura de 16 a 18 grados centígrados.



Otra opción es la cerveza, que puede ser una lager, una pilsner o una pale ale, que son cervezas con burbujas, amargor y frescura que pueden limpiar el paladar y realzar el sabor del queso. Se recomienda servir la cerveza a una temperatura de 4 a 6 grados centígrados.


También se puede optar por una bebida sin alcohol, como un jugo de frutas cítricas, un té helado o una limonada, que son bebidas con acidez y dulzor que pueden refrescar la boca y contrastar con la sal y la grasa del plato. Se recomienda servir estas bebidas bien frías.